Las minorías pueden ejercer influencia en las mayorías, sin embargo, estas
últimas van a seguir viendo como diferentes a las primeras. Al colocarlas en
esta condición, las ponen en rechazo, en discriminación, aunque a la vez que son
detestadas también pueden ser admiradas, ya que se ven inmersos una serie de
factores que determina esto, es decir; en la objetividad pueden ser admiradas
por sus ideas o acciones, pero en la subjetividad van a seguir siendo vistos
como diferentes, sin embargo, pueden ejercer así influencia. Esta influencia
está basada más que nada en la admiración o en la aceptación de las ideas y del
cambio que se pretende lograr, pero quizás, no de formar parte de la
minoría.
Por todo lo anterior, las minorías buscan el reconocimiento social ya que se creen, poseen las características y capacidades intelectuales para ser tomados en cuenta, quizás no buscan la aceptación como tal, sino más bien, el reconocimiento de que tienen lo necesario para que se les tomen en consideración, según criterios de visibilidad y de atracción. Es extraño, ver cómo a pesar de que las minorías pueden tener buenas ideas en beneficio de ciertos aspectos, sigan siendo rechazadas, ya no tanto en el sentido de no hacer caso a sus peticiones, sino más bien, en el de no reconocer su trabajo e importancia viéndolos sólo como desviantes y diferentes.
Las minorías poseen varias ventajas, como el hecho de etiquetarlos como desviados, y no contar con la aprobación social, sin embargo este es un elemento que al mismo tiempo, los vuelve interesantes, ya que muestra otra forma de llegar a la solución de un problema.
Es importante entender que la mayoría de las personas sean consideradas como dentro de la mayoría o parte de una minoría siempre se encuentran en constante cambio o movimiento. Parte de todo esto implican ciertos comentarios o características que se le atribuyen. Si bien es dicha la minoría es considerada como una desviante en comparación con la mayoría.
Estas llegan a ser consideradas como mal vistas, se encuentra una clara diferencia entre lo que se puede relacionar con lo de “yo” y los “otros”. Lo que se busca siempre es un marcado reconocimiento, que si bien no es visto a la primera es importante destacar que existen muchos personajes que lo han tratado de hacer.
En general es importante entender el papel que desempeñan las minorías, y que pese a que podrían existir desventajas ante tal hecho. Estas siempre tenderán a estar en la búsqueda del reconocimiento social.
La desventaja de ser diferente.
Entre los factores que crean la atracción es la necesidad básica de aprobación social que incita al individuo a evitar a aquellos que le rechazan y a buscar a los que acepten y reconozcan tu modo de pensar obrar. También interviene la necesidad de comparación social que incita al individuo a tratar de obtener informaciones sobre sí mismo y sobre los otros a fin de formar un juicio correcto sobre sus propias aptitudes y opiniones. Por otra parte, la simpatía es correlativa a la atracción en consecuencia una minoría está condenada a ser rechazada y detestada.
Las pruebas empíricas relativas al modo en que las minorías son vistas y la actitud que suscita han sido obtenidas principalmente a partir de experiencias en las que los sujetos ingenuos han sido expuestos a la influencia de uno o dos cómplices, después de lo cual responden individualmente a cuestionarios post experimentales.
A la búsqueda del reconocimiento social
Esta perspectiva no resulta tan sombría para una minoría; estar marginado no es necesariamente una desventaja aunque tampoco sea una situación agradable. Ser detestado tampoco es un obstáculo para ejercer influencia pero lo más importante es conocer las fuerzas que impulsan a la minoría de asumir el riesgo de ser detestado, rechazado y saber lo que se gana con ello.
En resumen la necesidad de reconocimiento social tiene su origen en el supuesto de que el individuo o el subgrupo dispone de un excedente de recursos intelectuales y materiales, y se expresa por la sensación subjetivamente experimentada de certeza y de legitimidad acerca de la capacidad del individuo o del subgrupo para influir a los otros según sus propias tendencias y sus propias aspiraciones.
Relaciones de criterio único y relaciones de doble criterio.
Se llama relación de criterio único porque basta un solo conjunto de criterios para definirla.
El reconocimiento social va a la par con a la aprobación social, procediendo de la una de la otra y reforzándola.
El segundo tipo de relación es de doble criterio cuando se está de acuerdo con otras personas, cuando se está dispuesto a aceptar su punto de vista y se las admira, esto no quiere decir necesariamente que se desee convivir ni identificarse con ellas. Al contrario el individuo tendera a evitarlas a resistir su influencia y levantar barreras.
Este estilo de comportamiento consistente es un factor que determina la influencia orientada en tres aspectos como lo menciona Moscovici: la competencia, refiriendo que existen en nuestro país una necesidad por sobrevivir, encontrando una gran desventaja que orilla a algunos sujetos a delinquir, la convicción, este es un elemento muy interesante ya que al encontrarse con un país competitivo y no ser “capaces” hasta cierto grado de competir pueden justificarse diciendo que tienen a una familia que deben alimentar o simplemente que no tienen trabajo y por obvias razones dinero para su sustento, creando así un sentimiento de lastima a la sociedad es decir persuadiendo a los demás atacando el lado sensible de la humanidad (sentimientos) y por último abordaremos el factor del liderazgo, aquel grupo de personas que delinquen tienen un dirigente quien tiene hasta cierto grado la capacidad de mandar , organizar y buscar puntos estratégicos en los que la sociedad se encuentra frágil, recordemos algunos elementos de los líderes: tienen labor de convencimiento y sobre todo tienen la firme seguridad que ganaran cualquier batalla contra quien sea influyendo así en otras personas a unirse a una banda delictiva para que ya no sobrevivan sino vivan “dignamente” como ellos se merecen, sin miserias, ni más sufrimientos.
CONCEPTOS
Desventajas de las minorías: Las minorías pueden ejercer influencia en las mayorías, sin embargo, estas últimas van a seguir viendo como diferentes a las primeras. Al colocarlas en esta condición, las ponen en rechazo, en discriminación, aunque a la vez que son detestadas también pueden ser admiradas, ya que se ven inmersos una serie de factores que determina esto, es decir; en la objetividad pueden ser admiradas por sus ideas o acciones, pero en la subjetividad van a seguir siendo vistos como diferentes, sin embargo, pueden ejercer así influencia.
Atracción. Esta influencia está basada más que nada en la admiración o en la aceptación de las ideas y del cambio que se pretende lograr, pero quizás, no de formar parte de la minoría. Por todo lo anterior, las minorías buscan el reconocimiento social ya que se creen, poseen las características y capacidades intelectuales para ser tomados en cuenta, quizás no buscan la aceptación como tal, sino más bien, el reconocimiento de que tienen lo necesario para que se les tomen en consideración. Por otra parte, la simpatía es correlativa a la atracción en consecuencia una minoría está condenada a ser rechazada y detestada.
Reconocimiento Social. la atracción es la necesidad básica de aprobación social que incita al individuo a evitar a aquellos que le rechazan y a buscar a los que acepten y reconozcan tu modo de pensar obrar. También interviene la necesidad de comparación social que incita al individuo a tratar de obtener informaciones sobre sí mismo y sobre los otros a fin de formar un juicio correcto sobre sus propias aptitudes y opiniones. tiene su origen en el supuesto de que el individuo o el subgrupo dispone de un excedente de recursos intelectuales y materiales, y se expresa por la sensación subjetivamente experimentada de certeza y de legitimidad acerca de la capacidad del individuo o del subgrupo para influir a los otros según sus propias tendencias y sus propias aspiraciones.
Relaciones de criterio único. Porque basta un solo conjunto de criterios para definirla.
El reconocimiento social va a la par con a la aprobación social, procediendo de la una de la otra y reforzándola.
Relaciones de doble criterio. Cuando se está de acuerdo con otras personas, cuando se está dispuesto a aceptar su punto de vista y se las admira, esto no quiere decir necesariamente que se desee convivir ni identificarse con ellas. Al contrario el individuo tendera a evitarlas a resistir su influencia y levantar barreras.
Por todo lo anterior, las minorías buscan el reconocimiento social ya que se creen, poseen las características y capacidades intelectuales para ser tomados en cuenta, quizás no buscan la aceptación como tal, sino más bien, el reconocimiento de que tienen lo necesario para que se les tomen en consideración, según criterios de visibilidad y de atracción. Es extraño, ver cómo a pesar de que las minorías pueden tener buenas ideas en beneficio de ciertos aspectos, sigan siendo rechazadas, ya no tanto en el sentido de no hacer caso a sus peticiones, sino más bien, en el de no reconocer su trabajo e importancia viéndolos sólo como desviantes y diferentes.
Las minorías poseen varias ventajas, como el hecho de etiquetarlos como desviados, y no contar con la aprobación social, sin embargo este es un elemento que al mismo tiempo, los vuelve interesantes, ya que muestra otra forma de llegar a la solución de un problema.
Es importante entender que la mayoría de las personas sean consideradas como dentro de la mayoría o parte de una minoría siempre se encuentran en constante cambio o movimiento. Parte de todo esto implican ciertos comentarios o características que se le atribuyen. Si bien es dicha la minoría es considerada como una desviante en comparación con la mayoría.
Estas llegan a ser consideradas como mal vistas, se encuentra una clara diferencia entre lo que se puede relacionar con lo de “yo” y los “otros”. Lo que se busca siempre es un marcado reconocimiento, que si bien no es visto a la primera es importante destacar que existen muchos personajes que lo han tratado de hacer.
En general es importante entender el papel que desempeñan las minorías, y que pese a que podrían existir desventajas ante tal hecho. Estas siempre tenderán a estar en la búsqueda del reconocimiento social.
La desventaja de ser diferente.
Entre los factores que crean la atracción es la necesidad básica de aprobación social que incita al individuo a evitar a aquellos que le rechazan y a buscar a los que acepten y reconozcan tu modo de pensar obrar. También interviene la necesidad de comparación social que incita al individuo a tratar de obtener informaciones sobre sí mismo y sobre los otros a fin de formar un juicio correcto sobre sus propias aptitudes y opiniones. Por otra parte, la simpatía es correlativa a la atracción en consecuencia una minoría está condenada a ser rechazada y detestada.
Las pruebas empíricas relativas al modo en que las minorías son vistas y la actitud que suscita han sido obtenidas principalmente a partir de experiencias en las que los sujetos ingenuos han sido expuestos a la influencia de uno o dos cómplices, después de lo cual responden individualmente a cuestionarios post experimentales.
A la búsqueda del reconocimiento social
Esta perspectiva no resulta tan sombría para una minoría; estar marginado no es necesariamente una desventaja aunque tampoco sea una situación agradable. Ser detestado tampoco es un obstáculo para ejercer influencia pero lo más importante es conocer las fuerzas que impulsan a la minoría de asumir el riesgo de ser detestado, rechazado y saber lo que se gana con ello.
En resumen la necesidad de reconocimiento social tiene su origen en el supuesto de que el individuo o el subgrupo dispone de un excedente de recursos intelectuales y materiales, y se expresa por la sensación subjetivamente experimentada de certeza y de legitimidad acerca de la capacidad del individuo o del subgrupo para influir a los otros según sus propias tendencias y sus propias aspiraciones.
Relaciones de criterio único y relaciones de doble criterio.
Se llama relación de criterio único porque basta un solo conjunto de criterios para definirla.
El reconocimiento social va a la par con a la aprobación social, procediendo de la una de la otra y reforzándola.
El segundo tipo de relación es de doble criterio cuando se está de acuerdo con otras personas, cuando se está dispuesto a aceptar su punto de vista y se las admira, esto no quiere decir necesariamente que se desee convivir ni identificarse con ellas. Al contrario el individuo tendera a evitarlas a resistir su influencia y levantar barreras.
Este estilo de comportamiento consistente es un factor que determina la influencia orientada en tres aspectos como lo menciona Moscovici: la competencia, refiriendo que existen en nuestro país una necesidad por sobrevivir, encontrando una gran desventaja que orilla a algunos sujetos a delinquir, la convicción, este es un elemento muy interesante ya que al encontrarse con un país competitivo y no ser “capaces” hasta cierto grado de competir pueden justificarse diciendo que tienen a una familia que deben alimentar o simplemente que no tienen trabajo y por obvias razones dinero para su sustento, creando así un sentimiento de lastima a la sociedad es decir persuadiendo a los demás atacando el lado sensible de la humanidad (sentimientos) y por último abordaremos el factor del liderazgo, aquel grupo de personas que delinquen tienen un dirigente quien tiene hasta cierto grado la capacidad de mandar , organizar y buscar puntos estratégicos en los que la sociedad se encuentra frágil, recordemos algunos elementos de los líderes: tienen labor de convencimiento y sobre todo tienen la firme seguridad que ganaran cualquier batalla contra quien sea influyendo así en otras personas a unirse a una banda delictiva para que ya no sobrevivan sino vivan “dignamente” como ellos se merecen, sin miserias, ni más sufrimientos.
CONCEPTOS
Desventajas de las minorías: Las minorías pueden ejercer influencia en las mayorías, sin embargo, estas últimas van a seguir viendo como diferentes a las primeras. Al colocarlas en esta condición, las ponen en rechazo, en discriminación, aunque a la vez que son detestadas también pueden ser admiradas, ya que se ven inmersos una serie de factores que determina esto, es decir; en la objetividad pueden ser admiradas por sus ideas o acciones, pero en la subjetividad van a seguir siendo vistos como diferentes, sin embargo, pueden ejercer así influencia.
Atracción. Esta influencia está basada más que nada en la admiración o en la aceptación de las ideas y del cambio que se pretende lograr, pero quizás, no de formar parte de la minoría. Por todo lo anterior, las minorías buscan el reconocimiento social ya que se creen, poseen las características y capacidades intelectuales para ser tomados en cuenta, quizás no buscan la aceptación como tal, sino más bien, el reconocimiento de que tienen lo necesario para que se les tomen en consideración. Por otra parte, la simpatía es correlativa a la atracción en consecuencia una minoría está condenada a ser rechazada y detestada.
Reconocimiento Social. la atracción es la necesidad básica de aprobación social que incita al individuo a evitar a aquellos que le rechazan y a buscar a los que acepten y reconozcan tu modo de pensar obrar. También interviene la necesidad de comparación social que incita al individuo a tratar de obtener informaciones sobre sí mismo y sobre los otros a fin de formar un juicio correcto sobre sus propias aptitudes y opiniones. tiene su origen en el supuesto de que el individuo o el subgrupo dispone de un excedente de recursos intelectuales y materiales, y se expresa por la sensación subjetivamente experimentada de certeza y de legitimidad acerca de la capacidad del individuo o del subgrupo para influir a los otros según sus propias tendencias y sus propias aspiraciones.
Relaciones de criterio único. Porque basta un solo conjunto de criterios para definirla.
El reconocimiento social va a la par con a la aprobación social, procediendo de la una de la otra y reforzándola.
Relaciones de doble criterio. Cuando se está de acuerdo con otras personas, cuando se está dispuesto a aceptar su punto de vista y se las admira, esto no quiere decir necesariamente que se desee convivir ni identificarse con ellas. Al contrario el individuo tendera a evitarlas a resistir su influencia y levantar barreras.
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